Existen algunas señales muy claras que pueden alertarnos de que nuestro perro está sufriendo estrés. ¿Sabrías detectarlas? Si sospechas que tu mejor amigo puede estar pasando por una mala situación lo puedes estimular a jugar ya sea con usted o con juguetes para animales, te recomendamos que sigas leyendo este artículo.
Reacciones exageradas
Quizás tu perro ya era un poco ladrador, comía cosas del suelo o quizás ya reaccionaba ante otros perros en el pasado. Fueran los que fueran sus hábitos, ahora observas su comportamiento más intenso. En el perro estresado las reacciones se intensifican.
Salivación y relamido
Si observamos que un perro se relame y saliva de forma muy exagerada será básico prestar atención a que no sea un hábito que lleva a cabo de forma repetitiva y constante. Es una de las señales de estrés en el perro que debemos tener en cuenta.
Falta de atención
Los perros que estresados sufren un nerviosismo generalizado que les hace tener dificultad para concentrarse, prestar atención, seguir nuestras órdenes de obediencia... Sin embargo, si tu perro presenta una falta de atención generalizada y desde siempre (no solamente ahora que está estresado) podrías evaluar junto a tu veterinario si se trata de un problema de déficit de atención.
Reactividad o huida
El perro estresado suele sentirse muy incómodo ante una situación desconocida o la cual le está produciendo estrés. Si por ejemplo, nuestro perro sufre estrés al encontrarse con otros perros, cada uno de estos encuentros hará que reaccione exageradamente. Eso hará que intente huir o bien que reaccione de forma muy negativa a este estímulo (ya sea una persona, un ambiente, un objeto o una situación en concreto).
Rigidez muscular
Especialmente en las situaciones que le producen estrés le podremos observas más tenso y rígido de lo habitual. Es habitual observar la cola y las extremidades en tensión, a la espera de que ocurra algún hecho significativo.
PARA ALIVIAR EL ESTRES EN NUESTROS COMPAÑEROS PODEMOS DARLE LOS SIGUIENTES ACCESORIOS PARA QUE JUEGUEN.